La Estrategia de Búsqueda para Personas Desaparecidas 2025-2030 contempla entre sus ejes la construcción de un Centro de Resguardo Temporal de Personas Fallecidas No Identificadas y No Reclamadas; y un presupuesto de 255 millones de pesos.
La fiscal General de Justicia capitalina, Bertha Alcalde, anunció que el primer eje está enfocado a la búsqueda de personas como prioridad institucional de la capital y contempla un Gabinete de alto nivel y la coordinación operativa de todas las autoridades primarias.
Como segundo punto se encuentra la coordinación interinstitucional a nivel metropolitano y nacional con el fin de homologar formatos y procesos para la colaboración y establecer acuerdos para el seguimiento interestatal; mientras que a nivel local el tercer punto refiere un protocolo de actuación de búsqueda inmediata, la emisión de un foto boletín único y el fortalecimiento de los equipos especializados.
El cuarto eje plantea el fortalecimiento y el enfoque a la búsqueda individualizada para casos durante los primeros 30 días; mientras que para la búsqueda generalizada se aplicará una nueva metodología con confronta masiva de bases de datos y notificación de localizaciones a familias.
El sexto punto plantea un modelo de apoyo a familias durante la búsqueda, así como acompañamiento para casos de larga data los cuales contarán con acompañamiento psicológico y trabajo social, garantizar adecuada atención y trata familias, y derivar los casos para atención de causas y situaciones de riesgo con otras instituciones.
En cuanto a la identificación y restitución de personas fallecidas el punto número ocho indica la construcción de un Centro de Resguardo Temporal de Personas Fallecidas No Identificadas y No Reclamadas que iniciará funciones este mismo año; además, contempla la obtención de ADN de las familias de personas desaparecidas y de las personas Fallecidas No Identificadas, esto al término de 30 días.
El Instituto de Ciencias Forenses y la Fiscalía firmarán un convenio de coordinación para alimentar el registro único de personas fallecidas y el intercambio de información para comparar bases de datos de ADN.
Las instituciones dedicadas a la búsqueda tendrán un fortalecimiento como la Fiscalía y la policía, lo que implica la generación de un nuevo equipo interdisciplinario forense en campo y fortalecer al personal.