Ciudad de México.– La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) anunció la conclusión de la carretera San Ignacio–Tayoltita, una obra estratégica que fortalecerá la conectividad y el desarrollo económico entre los estados de Durango y Sinaloa.

El proyecto, encabezado por el titular de la SICT, Jesús Esteva Medina, tuvo una inversión total de 3 mil 170 millones de pesos y beneficiará a más de 11 mil habitantes de comunidades que por años permanecieron aisladas.

La nueva vía cuenta con dos carriles a lo largo de 96 kilómetros, además de 14 puentes, tres viaductos y un túnel de 515 metros, conocido como “El Duranguense”. Su construcción, iniciada en 2019, generó más de 24 mil empleos directos e indirectos.

De acuerdo con la dependencia, los trabajos se dividieron entre ambos estados: 84 kilómetros estuvieron a cargo del Centro SICT Sinaloa y 11.6 kilómetros del Centro SICT Durango, donde se incluye el viaducto El Sauz, de 144 metros de longitud.

La carretera reduce en 10 horas el tiempo de traslado entre San Ignacio y Tayoltita, facilitando el transporte de productos agrícolas, ganaderos y mineros, además de potenciar el turismo regional.

Esta obra forma parte del Plan Nacional de Infraestructura 2025-2030 y busca fortalecer la seguridad, conectividad y el desarrollo económico de localidades como San Juan, Vado Hondo, Tepehuajes, Tenchoquelite, Los Brasiles, El Limoncito y Tayoltita.

Con este proyecto, el Gobierno de México reafirma su compromiso con el desarrollo regional y la consolidación del Segundo Piso de la Transformación.